sábado, 25 de octubre de 2008

LA HUELGA MEDICA…..






Palomas o Gallinazos




Quisiera comenzar este artículo recordando el famoso Juramento Medico:




El Juramento de Hipócrates



"Por Apolo médico y Esculapio, juro: por Higias, Panacace y todos los dioses y diosas a quienes pongo por testigos de la observancia de este voto, que me obligo a cumplir lo que ofrezco con todas mis fuerzas y voluntad.Tributaré a mi maestro de Medicina igual respeto que a los autores de mis días, partiendo con ellos mi fortuna y socorriéndoles en caso necesario; trataré a sus hijos como mis hermanos, y si quisieran aprender la ciencia, se las enseñaré desinteresadamente y sin otro género de recompensa. Instruiré con preceptos, lecciones habladas y demás métodos de enseñanza a mis hijos, a los de mis maestros y a los discípulos que me sigan bajo el convenio y juramento que determinan la la ley médica y a nadie más.Fijaré el régimen de los enfermos del modo que le sea más conveniente, según mis facultades y mi conocimiento, evitando todo mal e injusticia.No me avendré a pretensiones que afecten a la administración de venenos, ni persuadiré a persona alguna con sugestiones de esa especie; me abstendré igualmente de suministrar a mujeres embarazadas pesarios o abortivos.Mi vida la pasaré y ejerceré mi profesión con inocencia y pureza.No practicaré la talla, dejando esa operación y otras a los especialistas que se dedican a practicarla ordinariamente.Cuando entre en una casa no llevaré otro propósito que el bien y la salud de los enfermos, cuidando mucho de no cometer intencionalmente faltas injuriosas o acciones corruptoras y evitando principalmente la seducción de las mujeres jóvenes, libres o esclavas. Guardaré reseva acerca de lo que oiga o vea en la sociedad y no será preciso que se divulgue, sea o no del dominio de mi profesión, considerando el ser discreto como un deber en semejantes casos.Si observo con fidelidad mi juramento, séame concedido gozar felizmente mi vida y mi profesión, honrado siempre entre los hombres; si lo quebranto y soy perjuro, caiga sobre mí, la suerte adversa".

Como peruano me parece increíble ser testigo de lo que estoy viendo sobre este asunto de la huelga médica y como están estos piratas de blanco extorsionando a nuestro querido país.

Es de todos conocidos la pésima atención que dan estos profesionales si podría calificárseles como tal al igual que los técnicos y enfermeras al sufrido público usuario en general, de la seguridad social , que es el sector menos pudiente de la sociedad, misma que representa a la mayoría del país , sin embargo su fuerza es tal que hasta se dan el lujo de enfrentar y vapulear al fiscalizador, quien supuestamente solo busca lo correcto o mejor dicho que estos tipejos hagan lo correcto.

El hecho de querer cobrar por los días que no trabajaron (como si cuando no estaban de huelga realmente trabajaban) y pretender tomar de otras partidas los montos necesarios para beneficiarse económicamente no tiene nombre y el gran problema es que los usuarios, gente humilde mayoritariamente no cuenta con los recursos para que sus reclamos se escuchen apropiadamente, es más, para los medios de prensa este tipo de cosas no es de su real importancia ya que no capturan la atención pública y lógicamente a los serviles de turno que ocupan los puestos políticos tampoco , para que buscar problemas con grupo tan fuerte.

Este tipo de situaciones es común verlo en países como el nuestro donde la masa social es manejada solamente por un máximo del 4 a 5% de su población. Terreno de cultivo apropiado para que la absurda idea de que el comunismo es el camino correcto, eche sus raíces y crezca un árbol fuerte mismo que dara frutos de desgracia y sufrimiento general, terror de los pensamientos de ese 4 o 5%, sin darse cuenta realmente que ellos son los verdaderos culpables de que se presenten situaciones como esta.

Tampoco puedo dejar de lado el hecho de saber sobre casos de corrupción, mal desempeño profesional con daños irreparables de por medio incluyendo vidas y casos de violación que son protegidos por sus mismas directivas, usando las herramientas, medios económicos y tiempo que pagamos todos los usuarios para ser utilizados en forma y de manera arbitraria por estos seudo servidores de la sociedad en su propio interés.

La medicina debería ser una de las profesiones que no debería tener opción a parar ni hacer huelgas. Eso es algo que deberían pensarlo siempre los que elijan esta noble profesión de beneficio para su prójimo pero de sacrificio para el profesional.

Lic. Dante Arboccó, M.B.A.
Asesor empresarial

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